Nunca antes en la historia de Bogotá se había contado con tantos recursos para la seguridad: cerca de 1,1 billones de pesos.

Esos dineros, provenientes del Fondo de Vigilancia y Seguridad, la Secretaría de Movilidad y los Fondos de Desarrollo Local, se han invertido en la construcción de 13 CAI fijos (otros seis están en proceso de edificación), un alojamiento militar y una Unidad Permanente de Justicia (UPJ) en Puente Aranda.

A eso se suman la compra de unas 1.500 cámaras de vigilancia, la capacitación de la Fuerza Pública -en temas de seguridad, derechos humanos y convivencia- y la adquisición de 1.298 motos, 583 patrullas y 750 celulares para el Plan Cuadrantes de la Policía, entre otros sistemas que buscan una mayor cobertura de la seguridad.

Sin embargo, existen opiniones divididas sobre el efecto que esas multimillonarias inversiones han tenido sobre la seguridad de la ciudad.

Aunque la Administración defiende el impacto positivo de los recursos, expertos en seguridad coinciden en que, en lugar de avanzar, la ciudad retrocedió en este tema. Para la muestra, citan la más reciente encuesta de percepción de la Cámara de Comercio, según la cual, en el 2010, el 72 por ciento de los capitalinos sintió que aumentó la inseguridad, frente al 39 por ciento del 2008.

Ese informe también mostró que el porcentaje de personas que fue víctima directa de un delito subió siete puntos entre el 2008 y el 2010 (de 14 a 21 por ciento). Incluso, el hurto a personas aparece como el principal flagelo que afecta a los bogotanos, especialmente el robo de celulares. "El comportamiento de los delitos hasta el 2010 demuestra que la inseguridad está empeorando", advierte Jaime Torres, coordinador del programa 'Bogotá, cómo vamos'. "Si la inversión fuera tan efectiva, el homicidio tendría una tendencia diferente", dice el experto Jairo Libreros, al recordar que este gobierno recibió la tasa en 20,5 muertes por cada 100.000 habitantes, y en el 2010 llegó a 23,4. 

Contrario a las opiniones de los críticos y a las encuestas de percepción y victimización, la Secretaría de Gobierno sostiene que las inversiones se han traducido en una tendencia positiva para la seguridad, sobre todo en los cuatro primeros meses de este año. Destaca, principalmente, el descenso en materia de homicidios durante el 2011 (la tasa en abril era de 20,1).

Dos semanas después de que se ordenase la retirada de los equipos externos de vigilancia del edificio judicial de la capital ourensana, ha comenzado la instalación de las nuevas cámaras.

Se trata de un nuevo equipamiento cuya colocación aún está por concluir, con lo que todavía tardará algunos días en estar operativo. De todas formas, ya ha trascendido que se trata de cámaras de una mejor calidad que las anteriores y de las que además la Xunta ha adquirido una mayor cantidad, de forma que se reforzará la hasta ahora precaria seguridad en todo el entorno judicial.

Especialmente, quedará perfectamente controlado uno de los laterales del edificio, el que se encuentra anexo a los jardines de la rúa Concello. Ha sido esa zona, precisamente, la que se ha visto más desprotegida frente a los asaltos de los vándalos. Fue allí donde, hace menos de un mes personas que por el momento no han podido ser identificadas colocaron un artefacto explosivo de fabricación casera en una de las ventanas de la planta baja. Entonces había una cámara de seguridad enfocando hacia la zona, pero no pudo grabar nada porque no estaba operativa. Semanas antes, un fallo eléctrico que pudo haber sido provocado por una tormenta, había dejado inactivo todo el circuito. No fue reparado.

Aquel artefacto, que no llegó a explosionar, era el segundo que alguien colocaba en aquella misma ventana, la que da a la sede del colegio de procuradores. En septiembre del 2009 otro artefacto de similares características sí llegó a explosionar, aunque sin causar daños personales y provocando escasos desperfectos.

Hace algunos meses también se descubrieron numerosas pintadas, contra la justicia y quienes la imparten, en varias fachadas del edificio judicial. Se espera que una vez que se activen las cámaras, cesen todos los actos de vandalismo.

 

FUENTE: www.lavozdegalicia.es

La tranquilidad y la ausencia de incidentes sigue dominando en el recinto ferial de El Arenal, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento de Córdoba, que informaron tan solo de dos detenciones. Por otro lado, ayer se registró una menor afluencia de público que en días anteriores, aunque el párking instalado en las inmediaciones del Real registró algo más un 25 por ciento de ocupación. La seguridad es, por tanto, la nota predominante en esta Feria, donde las diversas cámaras de seguridad y la abundante policía que recorre las calles del recinto ferial están contribuyendo a esta situación, que hoy puede cambiar debido a la clásica avalancha juvenil.

 

FUENTE: www.diariocordoba.com

Una empresa municipal de Tel Aviv tiene previsto aprobar un presupuesto para un plan de seguridad sobre sus playas.
A raíz de los esfuerzos exitosos en Tel Baruch y Jerusalem, la organización Atarim colocará cámaras de seguridad en 13 playas de la ciudad que documentarán todos los eventos que sucedan.
Las imágenes se transfieren a una sala de control especial que se creará en el recinto del puerto de Tel Aviv.
Estas imágenes también servirán a la policía en la investigación de hechos de carácter penal. Las cámaras no son ocultas y se colocarán avisos sobre las mismas.
A su vez, el público en general podrá tener acceso a los resultados. La compañía tiene previsto crear un sitio en Internet donde los internautas pueden ver lo que está pasando en las playas en vivo.
Fuentes de Atarim dijeron que de esta forma, los residentes pueden decidir a qué playa ir.
La instalación de las cámaras está programada para ser completada en un año. La compañía también planea instalar taquillas en las playas y desplegar agentes de policía durante los fines de semana.
El presiednte de Atarim, Itamar Shimoni, dijo: "Nuestro objetivo es acabar con el fenómeno del carterista y hacer de las playas un lugar seguro para los jóvenes y las familias".

FUENTE: iitongadol.com

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido en Mérida a un joven de 34 años por su presunta autoría de un robo con fuerza en vehículo en el aparcamiento de un centro comercial.

La detención se produjo el pasado día 20, por parte de agentes de Policía adscritos a la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría Local de Mérida.

Este individuo ha sido detenido por hechos similares en cuatro ocasiones en este mes, por lo que es "de sobra conocido" por los vecinos del lugar, la zona del Polígono Nueva Ciudad, según ha informado el Ministerio del Interior en nota de prensa.

Así, una vez fue localizado por las cámaras de seguridad de los aparcamientos, "se centraron en él, pudiendo visionar con claridad cómo fracturaba con una piedra una ventanilla de una furgoneta de reparto, apoderándose de una mochila que se encontraba en su interior".

Estos hechos fueron debidamente comunicados a los agentes actuantes, que procedieron a su "inmediata" detención.

El detenido es un varón de 34 años de edad, que responde a las iniciales de A. P. A., con antecedentes policiales, quien tras la tramitación del pertinente atestado policial fue puesto a disposición de la autoridad judicial, decretando ésta su puesta en libertad.

 

FUENTE: www.europapress.es