Con los índices de delincuencia disparándose en algunas ciudades debido a los problemas económicos, el viernes se presentó en Galicia la Unión de Asociaciones de Empresas de Seguridad de España, que servirá de interlocutora con las administraciones públicas en Madrid a la hora de reclamar mejoras en la calidad de los servicios o la creación de un código deontológico. El presidente de la Asociación de Empresas de Seguridad de Galicia (Aesga), Roberto Lage, ve necesario disponer de este foro pese a mantener vivos organismos autonómicos como el gallego, que lleva en funcionamiento 17 años.
¿A cuántas empresas representa la asociación gallega?
Ahora somos 36 empresas de tres hasta 1.000 trabajadores. Tenemos de vigilancia, de instalación de sistemas de seguridad, receptoras de las señales de alarma, formación y consultoría. Ya tenemos una experiencia de 17 años, porque Aesga se creó en 1991.
En tiempos de crisis los robos aumentan, ¿esto está beneficiando al sector a la hora de aumentar contratos?
El sector de la seguridad privada estaba creciendo de una manera adecuada, aunque en este momento es cierto que se ha producido un cierto estancamiento. Muchas empresas reducen la inversión en seguridad. El sector del transporte de fondos sí se ha visto afectado de una manera importante porque se reduce el número de clientes con la crisis.
Como presidente de Aesga, ¿ve que las empresas gallegas tengan planes específicos para luchar contra el parón?
En estos momentos, lo que están haciendo es aguantar. No creo que sea un buen momento para la expansión; las empresas gallegas están intentando acomodarse dentro del ámbito español, buscando nuevos nichos de mercado. Los empresarios tienen mucho miedo a hacer inversiones pero la seguridad privada en Galicia está muy cualificada a nivel nacional.
¿Y a nivel estatal? ¿Cuáles son las líneas estratégicas?
La seguridad privada está en plena expansión. En este momento, tiene soluciones para todos los sectores y para todos los ámbitos. Las empresas españolas son destacadas y muy potentes y a lo mejor se puede realizar una internacionalización o una conglomeración, porque uno de los problemas del sector es que hay una gran cantidad de empresas pequeñas.
A pesar de la época de dificultades, ¿han notado un incremento de los robos o de la solicitud de sus servicios en Galicia?
Sí, sobre todo a nivel de sistemas de seguridad. Nos ha sorprendido que en las grandes superficies han aumentado los robos y, sin embargo, ha disminuido la seguridad. Es algo que nos llama la atención. También ha aparecido la figura del intruso que hace funciones de controlador de seguridad. Por otra parte, nos sorprende que algunos ayuntamientos hayan instaurado los serenos por las noches porque eso incumple la normativa de seguridad privada: las calles son de la Policía Nacional, la Guardia Civil o la Policía Local.
¿En donde solicitan más los servicios de seguridad?
Habitualmente, en las provincias de Pontevedra y A Coruña.
¿Quienes serían los clientes actuales de las compañías integradas en Aesga en Galicia?
La Administración pública en su mayor parte, el mundo empresarial, las grandes superficies y, con el tema de las entradas en viviendas y en chalés, también tenemos como clientes a urbanizaciones y particulares.
Durante las jornadas que se celebraron en A Coruña se habló de importantes cambios en la normativa. ¿Cuáles serían las modificaciones más importantes en el sector?
El cambio supone volver a cerrar el sector de los sistemas a las empresas no homologadas y todo va hacia las homologadas. Volvemos a tener el control aunque con la liberalización de la Ley Ómnibus no habíamos notado ningún bajón significativo del negocio.
FUENTE: www.xornal.com