El plan 'Red Azul' ayudará a la policía a obtener información ...
Amplían la colaboración entre policía y empresas de seguridad, pero sin cesión de datos privados■El plan 'Red Azul' ayudará a la policía a obtener información relevante de más de 1.500 empresas para su labor de seguridad.
Las empresas tendrán información de carácter operativa, pero nunca se facilitarán antecedentes o denuncias que pudiera tener un sospechoso.
No podrán conocer información personal ni acceder a bases de datos policiales.
El responsable de la policía niega que suponga la privatización del sector.
La Policía Nacional y las más de 1.500 empresas de seguridad privada que operan en toda España reforzarán la colaboración y el intercambio de información para mejorar la eficacia en la lucha contra el delito en un momento de crisis económica y de importantes limitaciones presupuestarias.
Esta mejora en la colaboración se ha materializado en un plan de cooperación entre el Cuerpo Nacional de Policía y los cerca de 100.000 trabajadores de la seguridad privada denominado Red Azul. El director general de la policía, Ignacio Cosidó, valoró positivamente este plan en su presentación y calificó que en materia de seguridad "colaborar siempre es sumar".
A través de la Línea Azul, una vía directa de comunicación entre la policía y las empresas, y la puesta en marcha de nueva aplicación informática conjunta, ambos podrán compartir información relevante para sus respectivas labores de seguridad.
Coordinación informativa
¿A qué tipo de información podrán tener acceso los trabajadores de estas empresas de seguridad? "Información operativa, consejos de cómo operar ante determinadas situaciones", aseguran a 20minutos.es fuentes de la Policía Nacional. En ningún caso se ofrecerán datos personales o información relativa a investigaciones policiales o que se encuentre en sede judicial.
Tampoco se podrá tener acceso a ninguna base de datos policial para saber si una persona sospechosa tiene antecedentes criminales o ya ha sido denunciado previamente. "No facilitaremos antecedentes o denuncias previas", remarcan desde la policía. Poniendo el ejemplo de un caso concreto, si un vigilante de una empresa de seguridad comunica a la policía de que hay un coche sospechoso rondado las inmediaciones de la empresa para la que trabaja, "la policía consultaría si ese vehículo figura como sustraído, enviaríamos a una patrulla al lugar y lo recuperaríamos", explican.
Otro ejemplo de consulta policial: si una empresa desea diseñar un plan de seguridad para una instalación concreta, podrá pedir a la policía información sobre las principales amenazas existentes en la zona, como robos, actividad de grupos violentos, o venta de droga.
También, si un detective privado tiene el encargo de localizar a una mujer, podrá solicitar a la policía que le informe si esta cuenta con una orden de protección por violencia machista, para evitar que se pueda informar al agresor de su paradero. Sobre este supuesto, desde la Policía Nacional descartan que se vaya a informar al detective sobre la situación de esa mujer: "La policía miraría si existe una orden de alejamiento o denuncia por malos tratos, y si es así, se pondría en contacto con grupos de atención a la mujer para que actúen en consecuencia, como se viene haciendo hasta ahora", aclaran.
Mayor fluidez, sin peticiones
Del mismo modo, si un trabajador de una empresa de seguridad tiene indicios de un acto delictivo o puede aportar una información que pueda resultar de interés para una investigación policial, tendrá la obligación de comunicarla a la policía. "Por ley, los trabajadores de estas empresas deben colaborar a petición de la policía", aseguran fuentes de la Policía Nacional. ¿Qué cambia entonces con el plan Red Azul? Desde la policía dicen que supone ir más allá de esas peticiones policiales y que "esa colaboración no sea tanto a nuestro requerimiento", matizan.
Si el dato aportado por la seguridad privada es relevante se incluirá en una base de datos de inteligencia policial y será puesto a disposición del resto de fuerzas de seguridad con competencias en la materia.
Cauces informativos
Las comunicaciones que los empleados de dichas empresas de seguridad harán a la policía se llevarán a mediante unos determinados "cauces informativos", aseguran desde la policía. Toda comunicación está canalizada a través de las brigadas provinciales de seguridad (denominadas securpri), que cuentan con unos listados de trabajadores y empresas para las que trabajan. "Estas brigadas tienen un diálogo de colaboración fluido y constante", dice la policía.
Además, las empresas de seguridad contarán con unos correos electrónicos y unos teléfonos concretos que se deben de utilizar para comunicarse con la policía.
No privatizará el sistema de seguridad
El responsable de la policía ha negado de plano cualquier planteamiento que pase por una privatización del sistema de seguridad ciudadana, pero al mismo tiempo ha rechazado cualquier sentimiento de desconfianza que pueda despertar el trabajo de las empresas de seguridad privada.
"Nuestra propuesta es sumar", ha añadido Cosidó, que ha asegurado que el sector "dinámico y competitivo" de la seguridad privada en España es un "referente" para muchos países.
El lema de Red Azul es "sumando seguridades", un objetivo que ha subrayado también el jefe de la unidad de seguridad privada de la Policía Nacional, Esteban Gándara, que ha insistido en que no se trata de que la seguridad privada sustituya en ningún caso el trabajo de la Policía Nacional.
Mejorar la seguridad en tiempos de crisis
Cosidó ha dejado claro que en tiempos de crisis, el Ministerio del Interior está "obligado" a mejorar la eficiencia de los recursos disponibles, tanto públicos como privados, articulando mecanismos que mejoren, por ejemplo, el intercambio de información policial
"La Red Azul no es ninguna ocurrencia, ni nace en el vacío", ha remarcado Cosidó, que ha insistido en que este plan servirá para multiplicar el número de efectivos que trabajan para garantizar la seguridad ciudadana en un momento de dificultades económicas
FUENTE:20minutos.es