La resolución, a la que ha tenido acceso Efe, archiva una denuncia presentada por el Colegio Oficial de Médicos de Guipúzcoa, que en junio de 2010 planteó a la Agencia de Protección de Datos sus dudas sobre la distribución "masiva" de estos listados.

Según la denuncia, Osakidetza elaboró unos ficheros Acces en los que, entre otros datos, figuraban la identidad de los pacientes y el medicamento que debían tomar.

Estos ficheros fueron enviados a los Jefes de Unidad de Atención Primaria, a cada médico y a cada enfermera, lo que el Colegio Oficial de Médicos de Guipúzcoa consideró una "distribución masiva" de listados que contenían "datos de salud del paciente" objeto de protección.

La Agencia Vasca de Protección de Datos, tras analizar la documentación remitida al respecto por Osakidetza, ha dictado una resolución en la que sostiene que "no encuentra razón alguna que permita poner en duda la manera de proceder tanto del Departamento de Sanidad y Consumo del Gobierno Vasco como de Osakidetza".

La resolución resalta que la elaboración de dichos ficheros buscaba el "interés general" de racionalizar el gasto sanitario, al sustituir los medicamentos de marca por genéricos y resalta que la sustitución de los fármacos "se ha producido de manera automática", proceso que "no exige el acceso por parte de persona alguna a la historia clínica de los afectados por la medida".

La Agencia insiste en que "los tratamientos de datos de carácter personal que se han realizado pretenden aumentar el consumo de medicamentos genéricos y la prescripción por DOE (Denominación Oficial Española)", lo que justifica esta medida de "gestión sanitaria".

La medida puesta en marcha por Osakidetza afectaba a cuatro principios activos de gran volumen y con "apreciable diferencial de precio entre la marca comercial y el genérico", según han indicado fuentes del Servicio Vasco de Salud.

El resultado de la puesta en marcha de esta iniciativa fue "muy positivo", según Osakidetza, ya que tres de los principios activos superaron a finales de 2010 el 90% de prescripción en DOE, mientras que el cuarto (risedronato) se quedó en el 65,97%, aunque partía en junio de un 1,7%.

En términos económicos, la aplicación de esta medida se tradujo en un ahorro de 7,2 millones de euros en 2010.

 

FUENTE: www.abc.es