El director de la AEPD subraya la importancia de «conciliar los beneficios de la tecnología con preservar los derechos y las libertades individuales»


El big data, las cookies, las quiebras de seguridad, el derecho al olvido, las evaluaciones de impacto o el Reglamento europeo serán algunas de las cuestiones más destacadas del seminario en un curso que concluye el próximo viernes


En un entorno como el de los cursos de verano, es evidente que la tecnología, que está de moda por diferentes fallos legislativos no podía faltar a esa cita con estudiantes y expertos todos los años. Desde ayer que fue inaugurado por el director de la Agencia Española de Protección de Datos, José Luis Rodríguez Álvarez, se imparte el curso ‘Protección de datos y nuevas tecnologías’, que tiene lugar durante las Actividades de verano 2014 de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander. El seminario, que se prolongará hasta el 4 de julio, tiene como objetivo exponer, analizar y debatir algunos de los principales retos que la garantía del derecho fundamental a la protección de datos plantea en las sociedades actuales, en las que se hace un uso cada vez más intenso de la información de carácter personal. En este sentido, Rodríguez Álvarez subrayó en su conferencia inaugural la importancia de buscar soluciones constructivas que permitan “conciliar los beneficios de la evolución tecnológica con preservar los derechos y las libertades individuales”. Asimismo, ha incidido en que reforzar las garantías es la receta principal para afrontar la situación actual de riesgos crecientes para la vida privada.

El director de la AEPD destacó que en los últimos tres años se ha generado tanta información como en toda la historia de la humanidad lo que, unido a una capacidad de análisis y de extracción de información personal sin precedentes, puede conllevar graves riesgos para la privacidad de las personas.
A este respecto, Rodríguez Álvarez se refirió a la explotación de los datos masivos, el big data, que ha calificado como “nueva revolución”. Sin olvidar que esta metodología de tratamiento de datos puede generar grandes beneficios sociales, también ha subrayado que entraña notables riesgos para los derechos de las personas.
“El big data se emplea principalmente para hacer predicciones, tratando aspectos referentes a qué está ocurriendo o qué va a ocurrir pero no por qué se han producido o van a producir. Con ello se pueden extraer conclusiones sobre individuos, señalar su tendencia a realizar determinadas conductas, o predecir su probabilidad de encontrarse en determinados estados, como situaciones económicas o enfermedades, entrañando un alto riesgo de discriminación”.
Rodríguez Álvarez también hizo referencia a que una parte de estos problemas pueden controlarse a través de técnicas de anonimización, un tema que junto al big data se tratará de forma individualizada en varias de las ponencias que tendrán lugar mañana. Entendiendo la anonimización como un proceso dirigido a impedir irreversiblemente la identificación de las personas sobre las que se tratan los datos y, por tanto, mitigando los riesgos, el director de la Agencia recordó varios estudios que alertan de la dificultad de configurar un conjunto de datos realmente anónimo, sobre todo teniendo en cuenta los beneficios perseguidos con esta actividad.
En la jornada de ayer también se analizarán las cookies y otras tecnologías de seguimiento online, unas herramientas que en los últimos años han permitido perfeccionar las técnicas de seguimiento y monitorización de las conductas de los usuarios, proporcionando perfiles precisos y exhaustivos. Las ponencias del curso de la UIMP dedicadas a estos temas analizarán cómo está aplicando la Agencia Española de Protección de Datos la normativa de cookies, así como las implicaciones que estas tecnologías pueden implicar para la privacidad más allá de la oferta de publicidad personalizada.

Un programa muy completo

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FUENTE:lawyerpress.com