En un clic en internet, muchos ojos se detienen.
CHINA ES CONSIDERADO como uno de los países que más censura internet. A pesar de los bloqueos del gobierno, no hay que descuidarse, los ciberpiratas también vigilan
Censura, bloqueos, espionaje y cibercrimen. Este es el lado oscuro de China, que concentra el mayor mercado de internet en el mundo, con 500 millones de usuarios, es decir, el 40 por ciento de la población del país asiático.
A pesar de que Facebook y Twitter están bloqueados por el gobierno, y Google funciona de forma intermitente, los internautas de esta zona del mundo son muy activos.
Tienen su propia red social llamada Renren, que debutó en bolsa este año y que concentra 31 millones de usuarios activos por mes.
También escriben en 140 caracteres a través de Sina, un servicio de microblogging, que emula a su rival occidental, Twitter.Y no se quedan atrás con los videos y acceden a una réplica de You Tube.
Tian Yun, que se hace llamar Felicia, para facilitar la pronunciación de su nombre, tiene 25 años y estudió español comercial en la Universidad de Shangai.
Trabaja como guía turística y para practicar el segundo idioma que domina, prefiere leer los diarios en formato impreso que llegan a su oficina, porque en la edición web el acceso es lento.
Ella prefiere socializar online a través de Kaijin, una red solo para Shangai, la Nueva York de Asia, en la que habitan 24 millones de personas.
Como otros de los 100 millones de los usuarios chinos que tienen internet en su móvil, Tian Yun interactúa en las redes sociales a través del celular.
Solo tres operadores de telefonía móvil: China Mobile, China Unicom y China Telecom, abastecen la gran demanda de usuarios del servicio de internet móvil que se puede conseguir por una tarifa mensual de 100 Yuanes (30 mil pesos), que ofrece 10 megas de velocidad.
El regulador de telecomunicaciones tiene un papel preponderante y ha hecho bajar las tarifas de interconexión por lo que el servicio de telefonía resulta ser barato y la penetración por ahora supera el 60 por ciento en un país de 1.300 millones de habitantes.
Saltar el bloqueo
A pesar de las alternativas, algunos usuarios de internet se las arreglan con servidores interpuestos o proxy, a los que se les paga una mensualidad, para saltarse el bloqueo central y acceder a los servicios como Twitter o Facebook.
A su vez, la explosión de microblogs, denominados Weibo en Chino inquieta al gobierno, en especial por el potencial para traspasar controles y censura.
En las grandes ciudades, donde se concentra la gran población de usuarios de internet, no es fácil encontrar sitios de acceso público a internet, excepto en locales como Starbucks y Mc Donald´s.
Pekín, a través de los tres operadores de telefonía móvil, tiene un plan de ofrecer 2 megas de servicio gratuito a través de un gran hotspot denominado "my Beijing", que funcionaría en ciertas zonas de la ciudad, como el complejo que fue sede de los juegos olímpicos de 2008.
Sin embargo, el requisito de autenticarse, a través del registro con número celular, puso nervioso a los potenciales usuarios, según indicó el periódico China Daily.
La supervisión es algo que se percibe no solo en la red de redes, sino en las grandes ciudades, extremadamente vigiladas con cámaras.
En la plaza de Tiananmen en Pekín hay decenas de postes, en cada uno de los cuales se ubican alrededor de siete cámaras de vigilancia.
En China, las autoridades no son las únicas que monitorean lo que hacen sus ciudadanos. Alrededor de 100 millones de chinos son víctimas de virus informático según un estudio de la compañía Rising, citado por Efe, lo que exhibe la actividad de ciberpiratas a la caza de información clave o el envío de spam.
Sin duda, al navegar hay más de un ojo puesto en cada clic