La Subalcaldía Max Paredes instaló un circuito cerrado de videovigilancia, que cuenta con seis cámaras de seguridad y una sala de monitoreo con televisores de 42 pulgadas, para prevenir los reiterados robos de equipos y dinero que se produjeron desde 2008.
El sistema permitirá la vigilancia 24 horas. El subalcalde Felipe Flores informó que las cámaras fueron ubicadas al ingreso, en el parqueo y en las oficinas que tienen más afluencia de visitantes.
“Tres están en la Unidad de Mejoramiento Barrial, una en la sala de reuniones del despacho del Subalcalde y dos en el Centro Administrativo Financiero”, indicó Flores. La inversión en la compra e instalación de los equipos es de aproximadamente Bs 40 mil. Las cámaras de seguridad tienen visión nocturna de 180 grados y se activan cuando hay movimiento.
La Subalcaldía sufrió constantes robos menores —celulares de los funcionarios, bolsos, etc.—, desde 2008. Sin embargo, en el primer semestre de 2010, se produjo un hurto mayor, casi $us 2.000 que tuvieron que ser repuestos por los empleados. “Hubo sospechas de nuestros empleados, pero la investigación de la Policía quedó ahí. Lo repusimos con rifas. Hay denuncias de que maltratamos a la gente y las filmadoras nos ayudarán a comprobar”.
De esas oficinas también se perdieron tres monitores, dos CPU, 15 celulares y dinero.