Tenemos que comenzar por afirmar que no hay ningún tipo de dispositivo que sea absoluto. Siempre existe una herramienta que logra romper la protección física. Lo que garantiza la mayor seguridad posible son los planes de protección que unen varios factores: sistemas tecnológicos, físicos y humanos.

La alarma sirve para dar aviso, la reja puede protegerme por un tiempo hasta que sea vencida. Todos esos factores son útiles para proteger, prevenir y desalentar, pero el factor humano debe estar presente: ya sea a través de la policía, los bomberos, la seguridad privada, etc.

Pero, además, si hablamos de seguridad debemos definir qué hacer "en caso de". Por ejemplo, si tengo un detector de humo en la cocina y este suena: debo saber dónde tengo el matafuegos y el número de los bomberos. Es decir, el sólo hecho de que el sistema electrónico detecte algo no es una condición suficiente. Lo mismo sucede cuando hay una intrusión: la alarma puede sonar, pero detrás tienen que llegar los vigiladores o estar programada para que llame a un centro que de aviso a la policía.

La idea es entender que se trata de subsistemas integrados entre sí que permiten reaccionar en el menor tiempo para que el daño sea el menor posible.

No se debería adquirir un sistema de seguridad, sin hacer un relevamiento previo de las necesidades del sitio a proteger. Estas necesidades no sólo se determinan por el tamaño de la casa. No es lo mismo una casa de las mismas características ubicada en un barrio privado que una que se encuentra al lado de un terreno abandonado o de una casa ocupada ilegalmente al fondo o en construcción, etc. También hay que evaluar el tipo de riesgo (personas, bienes, o ambos), la velocidad de detección requerida para evitar un daño importante (alarma temprana, asalto), etc.

Hoy es posible tener una cámara de seguridad que me muestre vía internet las imágenes de lo que frente a ella se sucedan en mi celular, a través de la tecnología 3G. O alarmas conectadas a centrales de seguridad a través de tecnología inalámbrica lo que garantiza que el contacto se realice aunque se corte la línea telefónica. Sin embargo, como indicamos antes, estas herramientas deben ser parte de un plan integral, donde todo este pensado para esa propiedad en particular y lo que se desee proteger.

 

FUENTE: www.eldia.com.ar