El Director de la Unidad Regional II de la Policía de Corrientes, Comisario Mayor Héctor Montiel, dio la versión de la institución sobre el incidente en que la familia de Gerónimo Ferrero denunció a personal de la Comisaría Primera por apremios ilegales, y dijo que hay personal también lesionado que denunciaron ahora al joven por agresiones. Dijo que estaba ebrio y haciendo desmanes en el interior de la fiesta, y que muchos testigos se ofrecieron a declarar.
Aclaró que afortunadamente y a pesar de los festejos de Navidad, se hizo un operativo que involucró a las cuatro comisarías y “puedo decir que el resultado fue exitoso porque se registraron muy pocos accidentes de tránsito, como así tampoco delitos contra la propiedad. Lamentablemente lo que empaña un poco esta actividad –aclaró-, es una denuncia radicada por un ciudadano de apellido Ferrero contra personal de la Comisaría Primera de Goya”.
Relató dando la versión de la entidad, que “este muchacho se encontraba en la Posada del Sauce, en aparente estado de ebriedad. Fue sacado del lugar por personal de seguridad privada y entregado a una comisión policial que estaba de custodia. Fue trasladado a la Comisaría Primera y antes de subir al vehículo forcejeó, primero con la seguridad privada, luego con la policía.
Estuvo promoviendo desordenes dentro del local –continuó-, y eso me consta porque me llamó mucha gente que estaba en el lugar y que está dispuesta a declarar sobre los desórdenes que hacía.
Fue trasladado y el informe dice que él mismo se habría producido las lesiones con el asiento de la camioneta, en la zona de la frente. El Jefe de la Comisaría Primera decide llamar a los padres para hacerle entrega del joven”, dijo y pidió aclarar que “también hay policías lesionados en la causa, que son propias del forcejeo del traslado de una persona en ese estado, y en principio la policía no iba a realizar denuncia, pero como ellos están lesionados lo hicieron”, dijo y recordó que tomó la causa el Juzgado de Instrucción Nº 3 a cargo del doctor Guillard y del Fiscal Palisá que recibe las declaraciones.
“Son ellos los que van a determinar si hubo excesos por parte de la Policía, o si en realidad este joven estaba molestando y fue trasladado por desorden en la vía pública”, enfatizó el Jefe Policial.
“En principio –relató el Comisario Montiel-, se trató de un procedimiento de rutina que lamentablemente esta familia tomó muy a la tremenda, y el personal que está lesionado tiene el derecho de radicar la denuncia que corresponde, ante la Fiscalía”
Insistió con que las lesiones que recibió el personal son las típicas de estos procedimientos, cuando hay forcejeos se producen lesiones de poca consideración.
Con vigor el Director de la UR II aseveró que “el hecho es mucho más espectacular que real, me molesta pero con este tipo de acciones no van a evitar que la policía trabaje. Aparentemente pretenden que la Policía baje los brazos, y mientras yo esté la Policía no va a bajar los brazos. Acá se va a determinar si la Policía cometió excesos, y si lo hizo el responsable será castigado, y si no la justicia lo decidirá. No bajaremos los brazos por más sensacionalismo que le pongan”.
FUENTE: www.corrienteshoy.com