Los caminos de la vida jamás hubieran juntado a Marco Antonio y Omar. El primero, vendedor de autos e inimgrante dos ocasiones. El segundo, un diseñador de 26 años de edad. Sin embargo, la religión U2 hizo posible el encuentro de los dos, para quienes ver a su banda favorita fue un sufrido camino.
“Trabajo como free lance y me costó mucho juntar para los boletos, pero he estado aquí los dos días previos al concierto y sólo puedo decir que valió la pena”, confesó quien solamente ha visto una ocasión a U2 en el Tour Vértigo.
Para Marco la vida no ha sido fácil, pero haberse ido dos veces a Estados Unidos le brindó la oportunidad de escuchar al cuarteto, aunque nunca lo ha hecho en su tierra natal. “La última vez que los vi fue en Denver, yo era parte de la empresa que vendia comida al staff y con el gafete pude colarme.
“Tengo un año en México y en octubre me gasté lo último que traía de mi deportación para comprar el boleto de mi chava y el mío”, contó.
Ambos coincidieron en que estar este miércoles en el Azteca sí tiene precio “y es muy elevation”, bromeó Omar.
No exageran: estacionamiento, de 150 a 300 pesos; playera, de 150 a 350 pesos; alimentos, desde los 25 por una “artificiada” hamburguesa, hasta los 100 por una insípida orden de sushi.
Todo esto sin contar la bebida que una vez en el concierto ingerirán, de 40 pesos cada una, si de cerveza se trata. La suma podría variar si se decide adquirir un impermeable de 15 pesos para guarecerse de la lluvia que desde las 17 horas amenazó con caer.
En la anterior visita de U2 a México, con el Tour Vértigo, el costo promedio del boleto por persona estaba entre 500 y 700 pesos, pero ahora se ha elevado. La reventa, tan sólo, ofrece los boletos de la zona general (350 pesos) a 600 o 700 pesos por localidad, dejando los preferentes y palcos arriba de los 2 mil 500 pesos, cuando en taquilla se vendieron a mil 600 y 2 mil pesos.
Y mientras todos hacen “su agosto”, un grupo de 30 voluntarios de Amnistía Internacional, organismo no gubernamental apoyado por Bono, aprovechó la tibia euforia de los asistentes, para intentar recolectar 10 mil firmas e instituir un decreto a favor de la igualdad en derechos humanos y básicos del país.
Pocos, pero bien seguros
Con cierta secrecía, la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP DF)armó un operativo para resguardar a los asistentes a la primera presentación del grupo en México. Mil elementos, entre policías de tránsito, de protección bancaria y granaderos fueron dispuestos. Por su parte, la empresa organizadora del concierto contrató a 450 elementos de seguridad privada “Lobo”, a los que se suman 100 personas por parte de protección civil de Coyoacán. El operativo de seguridad pública empezó a las 13:00 horas del miércoles y terminó a la una de la mañana de este jueves. Los integrantes de protección civil han asistido a los fans que acamparon desde hace dos días a las afueras del estadio, y permanecerán hasta hoy a las dos de la mañana.
U2 arribó por algún acceso de Tlalpan a las 17:40 horas y sus miembros descendieron en la puerta 11. El acceso a los fans VIP fue a las 14 horas, mientras que la entrada general a las 15:50.
FUENTE: www.eluniversal.com.mx