SEMANA: ¿De dónde sale la idea de que los Estados se vienen marchitando?

ARMANDO ESTRADA VILLA: En mi tesis, titulada Estado... ¿Todavía existe? explico que el Estado perdió el monopolio de las armas, la soberanía política y el control de la economía.

SEMANA: ¿Quién controla las armas?

A.E.V: Los particulares tienen hoy más armas que la fuerza pública. En Colombia, por ejemplo, por cada policía hay 1,4 agentes de seguridad privada. Y mientras hace ocho años teníamos 600 agencias de seguridad, hoy día hay más de tres mil. Hasta los edificios públicos están vigilados por agencias privadas.

SEMANA: Pero ese problema no es solo de Colombia...

A.E.V: No. Estados Unidos, por ejemplo, contrata mercenarios. Allá, por cada servidor público que presta servicios de seguridad, hay 1,7 contratistas privados.

SEMANA: Sin embargo, los países no se han vuelto a ver en guerras, ¿para qué armar a los Estados entonces?

A.E.V: Hoy lo que se viven son las llamadas nuevas guerras, conflictos dentro de los mismos Estados. En el caso colombiano, por ejemplo, hay combates contra fuerzas insurgentes, guerrilleros, paramilitares o señores de la guerra. Y lo mismo pasa en muchas otras partes del mundo.

SEMANA: Esas son guerras no declaradas.

A.E.V: Es que hasta ese monopolio lo perdieron los Estados. Antes, tenían el poder de declarar las guerras.

SEMANA: En cuanto a la pérdida de la soberanía económica, ¿qué encontró su investigación?

A.E.V: Los Estados hoy no son capaces de dictar las normas de la economía. Lo que hacen para tratar de adaptarse a la globalización es competir entre los mismos Estados y en esa competencia se dedican a complacer a las empresas multinacionales para que ellas fijen las condiciones.

SEMANA: O sea que los privados también están compitiendo con el Estado en cuestiones económicas...

A.E.V: Claro. El Estado está amenazado por organizaciones legales e ilegales. Las primeras son, por ejemplo, las empresas multinacionales. Y en los segundos están, indudablemente, los grupos de crimen global, que todos los días les quitan posibilidades a los Estados de controlar sus normas, su economía y su territorio.

SEMANA: ¿Y qué pasa con los TLC?

A.E.V: En los tratados los países ceden soberanía. Pero en el caso de Colombia frente a Estados Unidos, lo que hacemos es abrir el mercado para que ellos entren productos, mientras que a nosotros a duras penas nos compran materia prima barata.

SEMANA: Entonces, ¿quién será el que ejerza en el futuro el poder y el control?

A.E.V: Al final de mi tesis aclaro que aún los Estados son capaces de combatir la corrupción, el crimen global y de exigir el respeto al ambiente. Todavía falta que esto se ponga en cintura, pero es una tarea que solo puede ejercer un Estado.

 

FUENTE: www.semana.com