Los rebeldes libios liberaron a cuatro franceses miembros de una empresa de seguridad privada que habían sido detenidos en un puesto de control en Benghazi, informó hoy el Ministerio de Exteriores en París.
Los cuatro fueron trasladados a la frontera con Egipto y entregados a personal del consulado francés de El Cairo, según el ministerio. El jefe de los cuatro ex paracaidistas, Pierre Marziali, fue abatido en el puesto de control de la insurgencia el 11 de mayo, informó DPA.
Marziali era jefe y dueño de la empresa Secopex. Su intención era ofrecer ayuda a las autoridades rebeldes para la creación de un corredor seguro por el que se movilizasen empresarios y periodistas entre El Cairo y Benghazi, dijo al diario "Libération" su segundo, Robert Dulas.
El trayecto, sin embargo, era considerado de antemano como bastante seguro. Dulas, por otro lado, reconoció que la empresa había estado también en contacto con el régimen de Muamar Gadafi, aunque negó que hubiese asumido labores de inteligencia para Trípoli.
El gobierno interino de los rebeldes sostiene sin embargo que los cinco franceses armados habían llegado a la zona con "intenciones hostiles".
Las relaciones entre la insurgencia libia y Francia son excelentes. El gobierno de París fue el primero en reconocer al Consejo de Transición de Benghazi como representante legítimo del pueblo libio.
FUENTE: internacional.eluniversal.com