El entretenimiento de la sociedad mexicana, desde hace varias décadas, va muy de la mano con la televisión. En un comienzo Televisa marcaba la pauta, debido al monopolio que era en el sector. Hoy día compite contra TV Azteca, la pequeña Cadena Tres, Canal 22, Canal 11 y ya.
A pesar de existir más de un competidor, prácticamente Televisa y TV Azteca caminan sin qué nadie les haga sombra a sus contenidos, y no por qué estos sean de enorme calidad, sino más bien, por el poder que pueden ejercer a otras esferas, ya sea la política o el deporte mismo.
Televisión Azteca a través de sus canales 13 y 7, tiene poco tiempo en el mercado, situación que no le impidió imitar las peores acciones de su rival comercial. Televisa durante toda su existencia usó sus noticieros para hacer campaña a favor de algún candidato a gobernador o aspirante a presidente de la República, arregló partidos de futbol a favor de su equipo "América", compró campeonatos para ese mismo club, desprestigiaba a cualquier personaje que atentara contra su poder. Hoy TV Azteca reproduce de hábil manera ese esquema.
La primer evidencia de la que tengo memoria sobre un acto a reprobar por parte de TV Azteca, es en 2001, año previo al mundial de Korea y Japón de 2002, cuando la selección mexicana de futbol estaba a un parpadeo de ser eliminada, necesitando ganar sus últimos cuatro partidos y que Honduras perdiera dos, en igual cantidad de juegos. Sorpresivamente México ganó esos encuentros y Honduras perdió dos. Por esos días, el periódico hondureño "El Heraldo", narraba un encuentro de un enviado por parte de Televisa y TV Azteca a la Federación Hondureña de Futbol, para recibir un soborno, que ayudara a digerir una sugerida derrota contra la potencia mundial en el soccer llamada Trinidad y Tobago.
Si Televisa era capaz de arreglar juegos, Televisión Azteca no podía quedarse atrás, pues una ocasión, en unas largas vacaciones en España, en la Cadena Ser, pude escuchar una entrevista entre José Ramón de la Morena y el jugador español José Mari Bakero. El futbolista narraba como el Veracruz (equipo en el que él jugaba) recibía ordenes de sus entonces dueños TV Azteca, para que perdieran un partido contra el otro club de su propiedad, Morelia. Bakero se negó, cayó en desacato y un gol suyo de casi último minuto dio el empate al Veracruz a dos goles. Al llegar al vestidor el entrenador me dijo que había recibido una llamada de la ciudad de México diciendo que estaba despedido y que nunca más volvería a jugar en ese país, narraba José Mari al locutor de la Ser.
En 2005, cuando la selección mexicana de futbol asistió a la Copa Confederaciones en Alemania, un año antes del mundial en ese país, TV Azteca ya conocía el caso de dopaje de Carmona y Galindo debido a una investigación de David Faitelson y José Ramón Fernández. Ambos personajes están ya fuera de esa empresa, y fue hasta entonces que narraron en ESPN, que altos ejecutivos de la televisora del Ajusco les prohibieron dar a conocer la información, para no manchar el nombre del deporte en México. A final de cuentas la verdad se supo.
Hoy se jugará el primer partido de ida de la final del futbol mexicano en Morelia. La cancha debió estar vetada, pues lo ocurrido el domingo por la noche, cuando los michoacanos enfrentaron al Cruz Azul, es algo evitable. Es comprensible que el gobierno de Michoacán no pueda enviar a una enorme cantidad de elementos de seguridad al estadio, debido a los problemas de inseguridad que vive aquella parte del país, pero, lo que no es aceptable, es el hecho de que los dueños del Morelia, no contraten seguridad privada suficiente.
Al igual que Televisa, toda esta semana TV Azteca ya fungió como juez y emitió sentencia. Tanto en los noticieros como espacios deportivos de canal 13, la culpa es del portero del Cruz Azul "Jesús Corona", al dar un tremendo cabezazo al preparador físico del Morelia. Cierto es que actitudes como esa, deben ser castigadas, pero, los festejos burlones de Tomás Boy, los golpes que tiraron varios jugadores del equipo de TV Azteca y la falta de seguridad en el estadio, es algo igual de reprobable.
TV Azteca no sólo actuó como juez, pues en su papel de parte acusadora, editó videos para mostrar que la culpa no es por no tener quien vigile a los asistentes al estadio, sino del club de la cementera. El argumento que TV Azteca repite para justificar el no veto al estadio, es por que justo ahí, se va a inaugurar el campeonato mundial de futbol sub 17, donde se espera la presencia de Felipe Calderón.
Perdemos mucho vetando un estadio mundialista a pocas semanas de iniciar el torneo, comentan en el Ajusco. Será cierto que TV Azteca es una señal con valor.
FUENTE: mx.ibtimes.com