Cerca de 300 familias en Medio Queso, Los Chiles, sufren la represión por parte de autoridades y de guardias privados, tras ocupar tierras abandonadas y deshabitadas desde la década de 1990, por parte de una empresa holandesa.
La Asociación de Estudiantes de Antropología de la Universidad de Costa Rica, hizo este miércoles un llamado a la comunidad nacional para colaborar con alimentos para las 300 familias afectadas, que se encuentran en terrenos de la finca de 500 hectáreas.
Estas 260 familias han estado sufriendo continuas agresiones por parte de la seguridad privada, contratada por un finquero de apellido Varela, quien ha ocupado en precario dicha finca.
La Asociación aseguró que la seguridad privada ha estado realizando desalojos ilegales maltratando tanto física como emocionalmente a estas familias.
Los estudiantes solicitamos su colaboración. Vamos a estar recibiendo artículos no perecederos y de aseo personal, para que colaboradores de la organización Ditsö los lleven a la comunidad.
Advirtieron que entre los donativos no deben entregarse, ya que los agricultores son productores de frijoles y tienen almacenados cientos de quintales, que no han podido vender en el mercado.
El miércoles 11 de mayo, 20 campesinos, hombres y mujeres, fueron detenidos por el Organismo de Investigación Judicial de los Chiles y trasladados a la Fiscalía de Los Chiles para ser indagados en la causa penal que se sigue por el delito de usurpación en daño de Elmer Varela Rojas bajo el expediente No. 11-00072-706-PE. Después de permanecer detenidos por cerca de dos horas fueron puestos en libertad.
La detención de estos y estas campesinas, dentro de los cuales figuran gran parte del Comité de Tierras, espacio de coordinación y representación, conformado por las familias, se da días después de reiteradas visitas y entrevistas a los campesinos y campesinas por parte de oficiales del OIJ.
Los campesinos dijeron en un comunicado que agentes del OIJ "han recurrido a la mentira abierta y al engaño para obtener los nombres de los campesinos, diciéndoles que el motivo de sus preguntas es identificar familias que califican para bonos del IMAS o ante la preocupación de la presencia de los presidiarios fugados recientemente de las cárceles de Nicaragua".
Leonel Vargas Mora, uno de las campesinos que están dentro de la finca y que fue detenido el día 11 de abril, dijo que "estas acciones forman parte de una estrategia del empresario, quien ha contado con la complicidad de las autoridades locales y los servicios de la empresa privada de seguridad SEGURINOR (Seguridad y Asesoría del Norte), dirigida a amedrentar y aterrorizar a los campesinos para que desistan de sus legítimas demandas y a "descabezar" la organización de los campesinos".
Vargas Mora recordó que durante el segundo desalojo ocurrido el día 13 de abril del año en curso, en medio de tiroteo y la destrucción de los ranchos y los víveres de los campesinos, cinco campesinos, entre ellos dos menores de edad, resultaron heridos.
Además indicó que uno de los guardas privados, supuestamente pagados por Varela, abrió fuego a quema ropa contra un grupo de campesinos con una carabina cargada de balas de goma, causándole lesiones a al menos dos personas; Jeylin Cabrera Calvo, quien recibió impactos de bala en la nuca, el brazo derecho y en el costado derecho y Doña Sandra Ocampo.
Recordó que ese mismo día, Varela Rojas, "después de haber insultado a un grupo de campesinos que se encontraban fuera de la finca, encañonó a sus compañeros Isaías Jarquín Alemán y a Juan José Carrillo".
Vargas Mora agregó que el matonismo ha llegado al punto de ordenarle a uno de los guardas privados que le echara el carro a un grupo de campesinos, diciéndole "mate a esos perros".
Resaltó que el guarda privado lanzo el vehículo contra los campesinos y los arrastro alrededor de cinco metros, causándole lesiones a los señores Pablo Navarro Sanchez y a Doña Juana Rosa Mendoza Lagos, quien se encontraba con sus tres hijos menores Luis Felipe, Diana Carolina y Judie Lizeth, de apellidos Montalbán Mendoza.
Además, Vargas Mora denunció que todo este despliegue de matonismo se hizo a vista y paciencia de las autoridades de la fuerza pública y de la Licenciada Erika Araya, Abogada del Ministerio de Seguridad de la región, quien supuestamente está emparentada con Varela.
Las familias de campesinos han invadido unas fincas propiedad de las empresa holandesas NARANJALES HOLANDESES MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y CUATRO S.A., NARANJALES HOLANDESES S.A; Cedula Jurídica: 3-101-179075 y NARANJALES CORPORATIVOS HOLANDESES S.A, ubicadas en Medio Queso de los Chiles, las cuales miden cerca de 500 hectáreas
Si bien estas fincas fueron dedicadas al monocultivo de naranjas a inicios de esta década, sus propietarios las abandonaron hace años, situación que habría aprovechado Varela Rojas, empresario agrícola de la zona, para ocupar las fincas.
FUENTE: www.elpais.cr