Más de 1.500 hinchas acompañaron al equipo. Hubo un mix de “federales” y guardias privados en el operativo que se montó ayer en cancha de All Boys. No hubo incidentes.
Belgrano no estuvo sólo en su regreso a Primera División. Más de 1.500 hinchas piratasrespaldaron, con sus voces y sus banderas, el histórico retorno del Celeste a la “A”.
Si bien la pequeña tribuna visitante del estadio de All Boys no estuvo llena (su capacidad alcanza a 2.500 espectadores), la pasión y el aliento que bajaron desde los escalones que dan a la calle Miranda se hicieron sentir de principio a fin en el fresco atardecer de Floresta.
La gente que llegó desde Córdoba (no se vendieron entradas en la Capital Federal) además fue protegida por un operativo especial montado, a modo de prueba piloto, por la Policía Federal.
De acuerdo al esquema armado especialmente para la ocasión, alrededor de 200 efectivos uniformados fueron dispuestos para ocuparse de la seguridad en las afueras del estadio, mientras que la vigilancia dentro del club, tanto en las tribunas como en las dependencias interiores, estuvo a cargo de 170 efectivos de una empresa de seguridad privada.
Dentro del campo de juego, se ubicó un federal uniformado por cada tres empleados de seguridad privada y no se empleó a los miembros del Cuerpo de Infantería, que generalmente se ubican desarmados en los “pulmones” que separan a las hinchadas local y visitante.
Por su parte, el jefe del operativo se apostó en las afueras de All Boys, en la tercera anilla del operativo, al igual que dos subcomisarios que supervisaron el arribo y los cacheos a los parciales de los dos equipos que concurrieron desde temprano al estadio de Floresta.
Según explicaron fuentes policiales, la prueba piloto, que podría reiterarse en próximos encuentros del Torneo Apertura 2011/2012, apunta a reducir el número de policías que prestan servicios adicionales en los estadios. Esta modalidad se suma a otras medidas oportunamente dispuestas por el Ministerio de Seguridad de la Nación, que procuraron reducir el número de efectivos que estaban asignados a las custodias de edificios públicos y hospitales.
También se intenta disminuir el alto impacto que el costo de los operativos policiales tiene en la economía de los clubes, que en reiteradas oportunidades han puesto el grito en el cielo por las elevadas erogaciones que deben realizar para garantizar la seguridad. En Floresta, los resultados fueron óptimos. Pero habrá que ver qué sucede en partidos de mayor riesgo.
FUENTE: mundod.lavoz.com.ar