Pacto por la seguridad da primer paso
Empresa privada y Gobierno acordaron una mesa técnica. Presidente de la ANEP dijo que no despejaron todas las dudas que tienen sobre la tregua entre pandillas.
Empresarios y dirigentes de las principales gremiales empresariales del país se reunieron ayer con el presidente de la República, Mauricio Funes, y con el Gabinete de Seguridad para intentar darle forma a lo que el Ejecutivo ha dado por llamar un acuerdo nacional por la seguridad.
Los empresarios y el Gobierno acordaron la creación de una mesa técnica que, según un comunicado de Casa Presidencial, servirá para formular una propuesta de empleo para jóvenes y para pandilleros en etapa de rehabilitación.
Lo primero que hizo el presidente de la República durante la reunión sostenida ayer fue repetirle a los empresarios que el Gobierno no negoció con las pandillas beneficios carcelarios a cambio de la reducción de homicidios, sino que facilitó la logística para que la Iglesia católica mediara.
“La iniciativa vino de la Iglesia católica y quienes se sentaron a propiciar esta negociación entre los líderes de las dos principales pandillas fue la Iglesia católica”, declaró el mandatario.
El presidente también le aseguró a los empresarios que la decisión de separar a la Fuerza Armada del registro de las personas que visitan las cárceles del país no es un componente de una supuesta negociación con las pandillas.
El ingreso de televisores tipo plasma a los reclusorios tampoco es, a juicio del presidente, una concesión para los pandilleros encarcelados.
“El que algunos medios hayan publicado fotografías donde se ve a reclusos viendo programas de televisión forma parte de los programas que establece el mismo régimen penitenciario, que en ningún momento vulnera el derecho que tienen los reclusos de tener acceso a una película o a la televisión”, defendió Funes.
El presidente de la República le dijo a los empresarios que su gobierno no ha renunciado a la idea de perseguir o desarticular las pandillas. Prueba de esto, según él, es que el pasado 25 de abril el Ministerio de Seguridad desplegó en las calles a 400 agentes de la nueva Unidad Antipandillas.
El presidente pidió a los empresarios que hicieran propuestas sobre la metodología que se debe usar para la construcción del acuerdo contra la violencia. El mandatario manifestó que espera que ese esfuerzo no sea “contaminado” con intereses particulares o por intereses partidarios.
Al final de la reunión, el presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), Jorge Daboub, dijo que no les habían satisfecho las explicaciones que dio el Ejecutivo sobre la disminución de homicidios y sobre una supuesta tregua entre las dos principales pandillas del país.
“El Gobierno insiste en que no hay negociación. Hay cosas: dos y dos no suman cuatro; sin embargo, respetamos que el Gobierno quiera mantener eso o quiera limitarse a buscar soluciones sin dar las raíces del problema, pero obviamente hay inquietudes que no son de la ANEP, son de la población en general”, declaró Daboub.
El 9 de marzo pasado, los principales cabecillas de pandillas fueron trasladados desde el penal de máxima seguridad de Zacatecoluca hacia reclusorios con menos controles. Desde ese día, los homicidios empezaron a disminuir. El Gobierno ha negado una negociación con las pandillas y un obispo católico ha dicho que convenció a pandilleros de que, a cambio de nada, dejaran de atacarse entre sí.
recelo por acuerdo
En el encuentro participaron los empresarios Roberto Kriete, presidente de la junta directiva de Avianca-TACA, y Roberto Murray Meza, presidente de grupo AGRISAL, quien también participa en el Consejo Nacional para el Crecimiento, instancia que, según el Ejecutivo, está alistando una propuesta de “amplio alcance” para la generación de oportunidades.
El presidente de la ANEP agregó que espera que esta vez sí prospere el acuerdo convocado por el Ejecutivo. En ocasiones anteriores, recordó Daboub, no han pasado de la instalación de las rondas de discusión: “Es tercera vez que se nos llama para un acuerdo nacional. Yo he estado en dos mesas que nunca se volvieron a reunir después. Esperamos que esta vez no sea así”, dijo el dirigente.
En febrero pasado, un mes antes de que se activara la supuesta tregua entre pandillas, los cabecillas de una de las principales pandillas del país giraron órdenes a los pandilleros libres para que dejaran de extorsionar a pequeños comerciantes y dirigieran sus extorsiones a grandes empresarios. El Gabinete de Seguridad interceptó la carta donde los pandilleros, además de ordenar especializarse, sugerían el reclutamiento de militares y exguerrilleros. Daboub dijo ayer que ese tema no fue discutido en la reunión
FUENTE:La Prensa Gráfica