Ciudadanos de Zlintan retienen al primer ministro de Gobierno libio de unidad
Vecinos de la ciudad libia de Zlintan mantuvieron retenido al presidente del Gobierno de unidad de Libia designado por la ONU, Mohamad Fayez al Serraj, a quien acusaron de traición, quien hoy abandonó el país rumbo a Túnez, donde está establecido su Ejecutivo.
Al Serraj había viajado el viernes a Zlintan para expresar sus condolencias a las familias de las cerca de 65 personas que el jueves murieron en un atentado suicida contra una base militar, cuya autoría ha sido reivindicada por la rama libia de la organización yihadista Estado Islámico (EI).
"Hemos llegado a un acuerdo para poner fin a las protestas. Así Al Serraj pudo marcharse del país", dijo Mohamed Isamil, portavoz oficial del Gobierno de unidad nacional.
Según explicó a Efe Abdesalem Ashur, miembro del consejo municipal de Zlitan, el convoy militar que transportaba a Al Serraj fue interceptado anoche a su salida del lugar donde había dado el pésame a las familias de las víctimas.
"Al Serraj fue insultado por la mayoría de los ciudadanos, que le calificaron de traidor de su pueblo. Le han dicho que no es bienvenido ni en Zlitan ni tampoco en el resto de Libia", detalló Ashur.
El político, cuyo gobierno está establecido en Túnez, llegó a Zlintan procedente de la vecina localidad de Misrata en un convoy compuesto de 15 vehículos armados, y solo permaneció en la carpa 10 minutos, agregó Ashur.
Por su parte, una fuente de seguridad dijo a Efe que el presidente del Gobierno de unidad nacional se reunió con miembros del Consejo presidencial bajo una fuerte presencia policial para hacer frente a los manifestantes.
Tras llegarse a un acuerdo con quienes le retenían de que el primer ministro abandonaría Libia, Al Serraj fue trasladado en helicóptero a Misrata, desde donde partió hoy a Túnez, añadió.
El atentado de Zlintan se produjo cuando un hombre al volante de un camión cisterna repleto de explosivos se empotró contra la puerta de la base militar, utilizada para el entrenamiento de los guardias que luchan contra la inmigración irregular.
Horas después, seis agentes de seguridad de instalaciones petroleras y un civil perdieron la vida en un segundo ataque, esta vez contra un puesto de control en la ciudad de Ras Lanuf, en el este de Libia.
Responsables de seguridad en la vecina localidad de Ajdabiya declararon a Efe que un hombre al volante de un vehículo cargado de explosivos se empotró contra el puesto y causó, además de los muertos, cinco heridos.
Grupos yihadistas libios afines al EI emprendieron el lunes una ofensiva para hacerse con el control de los puertos petroleros de Ras Lanuf y Sidra, los más importantes del país.
Este intento de asalto, repelido por la seguridad privada que protege las terminales, ha causado ya la muerte a más de una decena de combatientes de...LEER NOTICIA COMPLETA.