Empresario de seguridad privada muere acribillado
Faisal Aranky Rabanales, un empresario de 44 años propietario de compañías de seguridad privada, fue asesinado ayer por varios hombres que se conducían en motocicletas y que a la altura de la 9a. avenida y 20 calle de la zona 10 interceptaron el paso al vehículo en el que viajaba para disparar en repetidas ocasiones, lo que le ocasionó la muerte minutos después en un centro asistencial.
Según investigadores de la División Especial de Investigación Criminal (DEIC) de la Policía Nacional Civil (PNC), el ahora fallecido condujo su vehículo gravemente herido desde la dirección antes citada hasta un hospital privado ubicado en la zona 13.
Al llegar al centro asistencial descendió del auto y pidió auxilio, por lo que de inmediato personal médico lo atendió, pero al ingresar a la sala de operaciones falleció debido a la gravedad de las heridas, indicaron los médicos.
Las fuerzas de seguridad descartaron que el móvil del crimen fuera un asalto, ya que al revisar el vehículo, tipo picop, encontraron un arma escondida bajo la alfombra del piloto, un teléfono celular y su billetera, por lo que de manera preliminar la Policía cree que fue un ataque directo en su contra.
Doble escena
Los investigadores de la Fiscalía de Delitos Contra la Vida del Ministerio Público (MP) tuvieron que procesar dos escenas del crimen, una en el automóvil de Aranky Rabanales y otra en la sala de operaciones donde murió, explicó la vocera del MP, Julia Barrera.
“Como en este caso la víctima se movilizó, los investigadores no pudieron procesar la escena donde ocurrió el crimen, por ese motivo trabajaron las dos escenas en el hospital, y luego se realizó la búsqueda en la dirección del hecho para recabar evidencia”, dijo.
En el lugar del ataque los fiscales encontraron solamente un casquillo, mientras que según los médicos y el informe del MP el empresario recibió por lo menos 18 impactos de bala en el cuerpo.
Un fiscal, que prefirió no ser nombrado, relató que la primera línea que tienen hasta el momento es que los asesinos lo siguieron por unas cuadras, y al llegar a la 9a. avenida comenzaron a disparar al vehículo de la víctima desde atrás y luego continuaron hasta llegar al lado del piloto, donde estaba ubicado Aranky Rabanales.
Un trabajador de la empresa propiedad del fallecido dijo que él (Faisal), siempre colocaba el arma en el lugar donde los investigadores la encontraron. Familiares y empleados del empresario aseguraron que no había recibido amenazas de muerte.
Fuente: elperiodico.com.gt