IdeasTecnología y comunicación05/06/12 - 19:26
¿Es posible lo privado en la red que todo ve?
La recolección de datos plantea un dilema a la sociedad: asumir que nuestras acciones serán siempre visibles o dedicar energía a elaborar nuestra imagen pública.

POR CHRISTINE D GANGI - THE NEW YORK TIMES

Big Data toma nota de la lencería que usted compra online.

Registra las consultas que usted tipea en los motores de búsqueda.

Recolecta sus correos electrónicos románticos cuando sus vehículos pasan por su casa (De acuerdo, lo hizo sólo Google, pero es para que la idea se entienda.) "Fue una de las mayores violaciones a la ley de protección de datos que se han visto", dijo a The Times Johannes Caspar, funcionario alemán del área de protección de datos, después de obligar a Google a mostrarle qué habían estado recabando de sus conciudadanos los Street View Cars de la empresa.

Las páginas de letra chica con las políticas de privacidad online no deben confundirse con un escudo entre los usuarios de Internet y los recolectores de datos, y los gobiernos de todo el planeta están tratando de poner orden en los enmarañados intereses comerciales y la seguridad de los ciudadanos.

En EE.UU., la Comisión Federal de Comercio controla si las empresas de Internet cumplen sus políticas de privacidad en relación a dónde y cuándo comparten información personal de los consumidores. La comisión, no obstante, no puede evaluar penalidades referidas a la mayoría de las violaciones, informó The Times, y tiene escasa influencia en cómo operan las empresas sin normas de privacidad.

"En EE.UU., la privacidad es cuestión del consumidor", dijo a The Times Jacob Kohnstamm, presidente de la Dirección Holandesa de Protección de Datos. "En Europa, es un tema fundamental relacionado con los derechos".

A comienzos de este año, la Comisión Europea propuso una ley que exigiría a las empresas de Internet obtener permiso de los usuarios en cuanto a la forma en que pueden ser usados sus datos personales, informó The Times.

Pero el apetito insaciable de los consumidores por información complica la legislación sobre protección de datos.

"No tenemos más opción que confiar en Google", dijo a The Times Christian Sandvig, investigador de tecnología de las comunicaciones y política pública en la Universidad de Illinois. "Dependemos de ellos para todo".

Y cuanto más dependemos de Google y Facebook, más dependen ellos de sus clientes respecto de sus modelos empresariales, que dependen considerablemente de la publicidad dirigida.

¿Qué opciones hay, entonces? Las empresas de tecnología trabajan para establecer mecanismos Do Not Track (No Rastrear), muy similares a las listas telefónicas Do Not Call (No llamar).

Jon Leibowitz, presidente de la Comisión Federal de Comercio, exhortó a las empresas de comercio minorista, publicidad y tecnología a hacer más que simplemente bloquear los avisos dirigidos, informó The Times. "Si bien todavía hay mucho por hacer con el Do Not Track, la comisión cree que los avances hasta ahora, sumados a las propuestas legislativas, generan un impulso" hacia métodos útiles para proteger la privacidad, dijo Leibowitz a The Times. Y mientras esperamos que esas medidas protectoras se hagan realidad, nuestra información seguirá siendo recogida con fines de lucro.

La recolección de datos plantea un dilema a la sociedad: asumir que nuestras acciones serán siempre visibles o dedicar energía a elaborar nuestra imagen pública.

O elegir la versión siglo XXI de la vida ermitaña: salir de Internet.

URL:http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/tecnologia-comunicacion/Big-Data-Internet-Privacidad_0_713328899.html

FUENTE:Clarín.com